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Bloomington

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Bloomington, en español 
"Activando la desidencia" - CD-Aloud Music 2006

Por J. E. Gómez / IndyRock  Un título que habla de activismo y disidencia nos hace pensar, ineludiblemente, en rock reivindicativo, sonidos gamberros y escenarios explosivos. Pues no. Eso no es Bloomington, la banda liderada por los hermanos Tato y Javier Torres, aquel grupo de indie que rompió los estereotipos del género con su primer trabajo, " The Magic Bullet Theory". Ahora Bloomington hace una inmersión en un sonido más cercano al post rock, con  melodias reiterativas, intimistas y cargadas de mensajes personales. "Activando la Disidencia" sí mantiene un cargado carácter militante, pero más hacia la palabra, los sentimientos, amor y desamor, que a las teorías de la revolución. El cuarteto se ha decidido a cantar en español después de dos discos con letras en inglés. Esta nueva concepción de la expresión musical les ha incrementado su profundidad y densidad. 

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Bloomington  `kill the rock stars we were' Aloud music 2003
por Fernando Navarro - IndyRock

Hacia tiempo que un título no remitían tan claramente al contenido del disco, a las intenciones de la banda. Se proponen Bloomington en su segundo disco tras `The Magic Bullet Theoryí asesinar a las estrellas de rock que fueron. Y eso es exactamente lo que hacen. En `Kill The Rock Stars We Were' Bloomington aniquilan el rock con una obra extensa, amplia (cercana casi a la hora) en la que exterminan al rock usando como arma el propio rock. Disco de guitarras, de una fiereza a veces ingobernable (como la rapaz desafiante que, en medio de un azul melancólico y vertiginoso, corona la portada) 
`Kill The Rock Stars We Were' se mueve en terrenos cercanos al hardcore o al emo (tiene al menos en común con esos movimientos el amor por las guitarras 
afiladísimas y la esquizofrenia, valentía compositiva) aunque resulte, a la larga, un disco de rock agónico, moribundo. Con la intención de ser, quizá, el último disco de rock. Con un sonido ruidista e imposible (la saturación de las texturas, al límite de las posibilidades del oyente desprevenido de `The Call o `Julia ) que, abruptamente, se transforma en melodías acústicas, inquietantemente sosegadas (la conmovedora `Somewhere in Amarillo, tx, la atmósfera hipnótica de `The Rumble Sea' o la hermosa, breve nana `Lullaby N1) que degenera, a veces, en una de las más contundentes explosiones de rock conmocionado que hemos escuchado en tiempo (`Sta. Pauli Neon Lights o los diez minutos de `Last Chance to Hope) donde descubrimos que se han salido con la suya. Bloomington han masacrado, sin piedad, las estrellas de rock que alguna vez fueron.

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Formación:
JOSÉ TATO: guitarra, voz.
JAVIER TORRES: bajo.
JUAN JESÚS TATO: batería

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Biografía 
Pocos podían apostar allá por el año 94 que José Tato (guitarra,voz), Javier Torres (Bajo) y Juan Jesús Tato (batería), que acababan de formar un combo influido por las tendencias ruidosas del pop del momento, iban a convertirse en la más fuerte promesa del indie-rock patrio. "El indie-rock es power pop, noise, folk, lo-fi, punk rock, psicodelia, rock experimental, shoe-gazer, surf, hardcore, beat,...¿por qué tienes que elegir cuando puedes tenerlo todo?". Sus razonamientos son convincentes, aunque las que están fuera de toda duda son sus canciones. En ellas podemos encontrar la parte práctica de la teoría definida: desde inconmensurables canciones de power pop hasta intensos instrumentales de reminiscencias psicodélicas, pasando por el punk rock o los temas folk con espíritu noise. Sí, de acuerdo, es sólo indie-rock, pero me gusta. 

Pero la historia debe empezar por el principio, y el principio podemos situarlo en Noviembre del 98. Después de unos años preparando el terreno, (componiendo canciones, puliendo los directos, sonando en ocasiones esporádicas en Radio 3), llegó el momento en el que el grupo sintió la necesidad de "profesionalizar" sus intenciones, al percatarse de que el nivel alcanzado, tanto en la elaboración de temas como en sus actuaciones en directo, debía suponer dar un paso hacia delante. En noviembre del 98 coinciden dos hechos significativos: la edición por parte de Subterfuge records de una canción de Bloomington abriendo una recopilación de nuevas bandas, y la primera maqueta oficial del grupo. Esta maqueta se llama "Perfect things ep"(nov.98).

Inmediatamente se empiezan a emitir en Radio 3 aquellas canciones con gran aceptación y Bloomington recibe una oferta de una compañía barcelonesa para editar un single. El grupo la rechaza. "Las exigencias eran muy altas y las promesas de prosperar no eran muy atractivas. Había más sombras que luces, y Bloomington nunca ha tenido prisa por firmar contratos. Sólo quiere hacer canciones". La banda sigue componiendo canciones y grabándolas en su propio estudio: Tribal Secret, un modesto 8-pistas del que obtienen resultados milagrosos. Comienza el año 99 y Bloomington ha grabado once nuevas canciones. Determinan que de entre ellas producirán su segunda maqueta. Así, aparece "This mother earth ep."(mayo 99). "Lo bueno de Bloomington es que nos reinventamos a cada momento. Por eso nos quieren nuestros fans, y por eso somos distintos a los demás grupos. No tenemos ningún problema en grabar las canciones que hemos compuesto sin pensar antes en qué demonios de canción vamos a hacer. La evolución se demuestra andando".

En septiembre aparece la nueva maqueta de Bloomington: "Universe ep."(Sept.99). Una nueva manera de acercarse al futuro: Guitarras rotundas, melodías enérgicas y formidables bases rítmicas. La maqueta se cierra con una canción instrumental que marca un nuevo hito en la carrera de Bloomington. "Algunas canciones no necesitan letra. No es algo premeditado. Se compone la parte instrumental de una canción y, a veces, ya no necesita más que la música. Entonces ya puede sugerir, ya puede comunicar. Return to Dulwich Road es quizás una de las canciones más redondas que nunca hemos compuesto, y no necesita letra para contagiar la turbación que sugiere, esa sensación de zozobra que deja caer".

En el mismo mes de diciembre aparece en la revista Rock de Lux una crítica del "Universe ep", en la que se insiste en que las canciones están poseídas por el vigor de las múltiples ramas del rock independiente del último decenio: "Entre Urusei Yatsura, Girls against Boys y Yo la tengo, melodías intensas y ruido cortante". 

En el mes de marzo del 2000, después de algunas actuaciones en directo presentando sus canciones más contundentes, se encierran en los estudios Tribal Secret para grabar sus nuevos temas. Un nuevo ep. de cinco canciones "Faces ep." (Abril 2000). 

¿Por qué nace BLOOMINGTON en 1994?. Simplemente por la necesidad que los hermanos Tato y Javier Torres tienen por expresar sus sentimientos a través de la música. Aportando una visión diferente al panorama del indie-rock, decidieron empezar una labor compositiva que se ha ido perfeccionando con el paso de los años. Batería, bajo, guitarra y voz, y una receta sencilla a seguir: honestidad en la búsqueda de la canción perfecta. De este modo, BLOOMINGTON, inició una muy particular carrera para encontrar la esencia de esa canción perfecta, armados con sus guitarras exuberantes y sus ritmos infecciosos. 

PRIMER LP DE BLOOMINGTON (Febrero 2002)
De las mentes más inquietas a menudo se pueden esperar las mayores genialidades. Así debemos pensar si ya tenemos en nuestras manos el primer trabajo de Bloomington, The Magic Bullet Theory , una conspiración emocional en toda regla, que nos sorprende tanto en el plano anímico como en el sonoro. José Tato, Javier Torres y Juan Jesús Tato se han instalado en el lado más creativo del indie-rock y allí se desenvuelven con una comodidad pasmosa. Creando sus composiciones a partir de los esquemas aprendidos de la vieja escuela norteamericana (Pixies, Sonic Youth, Pavement, Guided by Voices), y convirtiéndolas en una irremediable atracción para el que escucha, al que atrapan en un universo de melodías asfixiadas con un lenguaje sencillo, intenso y espontáneo, que termina por seducir a los oyentes más cautos. Ya desde el título, (clara referencia a la leyenda norteamericana: una de las teorias del asesinato de J.F.K.), Bloomington deja patente su querencia por los sonidos que vienen de aquel país. Pero, una vez escuchado el disco, podemos comprender que lo que más le interesa de los USA es la América derrotada que se oye lamentar en las canciones de Sunny Day Real Estate, Pedro the Lion, o en las de sus admirados Death Cab For Cutie. En la misma dirección se encuentra el diseño de la carpeta ideado por Agustín Arribas. Un diseño muy fluido por la estética cruda y salvaje de las películas de Sam Peckinpah, donde se mezclaba a partes iguales la violencia y el lirismo, lo que proporciona a las canciones el marco adecuado en el que poder desarrollarse con fluidez. La producción de Pablo Iglesias (La Habitación Roja, Niños Mutantes...), contundente y sin fisuras, intenta llegar al ideal de perfección a través de la claridad. Y por ello se han eliminado los excesos en la instrumentación y, de este modo, las canciones fluyen con naturalidad y coherencia. Al escuchar el lp comprendemos que en canciones como Universe, Something about good luck, Here comes the sunrise o la extraordinaria Shine , es en las que se impone la esencia más palpable y disfrutable del grupo, producto de una documentada y depurada asimilación de diferentes influencias, y las intuitivas aportaciones personales de los tres miembros de Bloomington. Pero, además, en el disco hay hueco para canciones que demuestran el oficio y la constante experimentación del grupo: Return to Dulwich Road y I Know what your are son dos sorprendentes canciones instrumentales con una adecuada mezcolanza de violencia y sensibilidad interpretativa. Dos canciones que abrasan en su desnudez y en su permanente equilibrio. De la misma manera sobresale Big Horses coming in, una agradecida dosis de locura venenosa en la que destacan las guitarras acústicas de los sobrecogedores estribillos y una letra que roza el sentimiento atormentado de un Alex Chilton (I know a real place where sleeping bears are waiting). En definitiva, haber permanecido en constante evolución durante los últimos ocho años, soportando todo tipo de situaciones desfavorables, y aparecer de improviso con algo tan exuberante posee un valor fuera de toda duda. The Magic Bullet Theory suena cool, con la agresividad y el lirismo suficiente como para ser una obra duradera.

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