Fun Lovin' Criminals

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Esparrago Rock 2001 - 14 julio
Fotos: J. E. Gómez © IndyRock

Esparrago Rock 2001, crónica

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Fun Lovin' Criminals, "I love livin' in the city" Sanctuary  2005
por Luis Rodrigo Alvarez - IndyRock

Para muchos, Fun Lovin' Criminals son sólo una banda anecdótica que tuvo un hit a mediados de los noventa con "Scooby Snacks". Para otros, representan el espíritu de la ciudad de Nueva York de una manera que, aunque haya quedado un poco desplazada últimamente por el retorno a sonidos nuevaoleros, es imperecederamente cool: el glamour gangsteril italo-americano, el soul, el vestir elegantemente, etc.

Este quinto disco de FLC, "I love livin' in the city", es un homenaje explícito a su ciudad que hubiera sorprendido poco a principios de 2002, entre todo el alud de obras marcadas por el 11-S. En este album, el dúo formado por Huey y Fast (benditos nombres), deja aparcado el sonido Motown que hizo tan especial su segundo (y mejor) disco, "100% colombian" y se aventuran en un terreno algo confuso de samplers y sonidos más luminosos y contemporáneos, traspasando en ocasiones la delgada línea que los separaba de toda la morralla R&B que triunfa en los EEUU. Por ejemplo, la utilización de un conocido tema de la banda sonora de "Love Story" en " Ballad of NYC"  recuerda a lo que hizo con el "Para Elisa" el rapero NAS en su simplón y vergonzoso single. En otros temas, como "City boy", los ritmos reggae convierten la nocturnidad que siempre les ha caracterizado en un popurrí saltarín bastante decepcionante.

También es curioso que, al lado de toda esta vena como más festiva que tienen ahora, haya espacio para otros temas reposados en los que adoptan una actitud concienciada y reflexiva muy extraña en ellos, como en "Gave up on God", "The girl with the scar" o el ya citado "Ballad of NYC". Uno se pregunta si van en serio o si es una ironía tan rebuscada que ya no se entiende como tal. Fun Lovin' Criminals siempre han encontrado un filón en la mezcla de estilos e influencias, pero esta vez no han dado con los ingredientes adecuados. Cuando en un disco los mejores temas son los que nos recuerdan a obras pasadas ("How it be"), es que las cosas no andan bien. Esperemos que vuelvan a encontrarse pronto; sería una verdadera lástima perderlos.

Foto: Q magazine

Es sólo Rock and Roll, hermano
Daily Telegraph, 2 de Diciembre de 1999
Huey de FLC está convirtiéndose en tan famoso por su afición a los bares 
como por su música.
Cuando a Liam Gallagher "se le fue la olla" el pasado fin de semana, volviendo a caer espectacularmente después de meses de estar sobrio, ¿ quién le acompañaba en el tan de moda bar del Metropolitan Hotel de Londres? No podía ser otro que Huey, voz y guitarra de FUN LOVIN' CRIMINALS. Si te vas a meter en líos, lo mejor es tener buena compañía.

Y Huey tiene ya buena reputación en estos temas. Un "cachondo" encantador, se está haciendo famoso por su "deja-los -buenos-tiempos-del-R'n'R" entrar en tu vida tanto como por sus habilidades musicales. Cuando el Museo Madame Tussaud le invitó recientemente a engrosar con su figura de cera la lista del London Rock Circus, le pidieron que posara con una copa en la mano. 
"Vas allí y ves al resto de estrellas con sus historias, como Lenny Kravitz con su guitarra, y yo estoy simplemente con mi vaso alto", me contó Huey cuando le vi la semana pasada. "Quería tener un cigarro en la otra mano, pero me dijeron que la gente los roba. Si estás en el museo y te mueres por fumarte un cigarro, supongo que es lo que harías". ¡Todo un personaje!
Así que, aunque no quiero con esto buscar excusas, sí es un preámbulo para mostrar las circunstancias poco propicias en las que se desarrolló esta entrevista. Con el minibar de la habitación del hotel a nuestra disposición y toda una tarde por delante, tanto el periodista como el entrevistado se encontraban en estado lamentable cuando llegó el momento de encender la grabadora. De hecho, y como una cortesía profesional, sentí que era mi deber informar a Huey que quizá tendría problemas para hacerle preguntas coherentes. "No te preocupes por eso hermano", me tranquilizó Huey, "trabajaremos en equipo". Incluso, Huey parecía contento de tener que hacer él todo el trabajo. Tal y como pueden atestiguar tanto Liam Gallagher como un buen puñado de amigas famosas (incluyendo a Nicole Appleton de All Saints), este "chico de la calle" neoyorquino de clase trabajadora puede resultar una excelente compañía. La bondad que exuda le hace muy asequible. Y le gusta hablar, demostrando imaginación y comicidad en todo lo que sale de su cabeza. 
Mientras que su rápido ingenio tiene a menudo un lado cortante, su calidez personal difumina sus comentarios más incisivos. Por eso estoy convencido que no habría intención de ofender cuando de repente declaró, sin venir a cuento: "me gustaría ser Alanis Morrissette. Es horrible pero ha vendido tantos discos, debe tener unos 40 o 50 millones de dólares. Podría comprarse una isla en Grecia, eso es lo que yo haría. No te enfrentes tanto con la gente. No tiene por qué. Tiene pasta. Disfruta de la vida, sólo tienes 25 años. Y además es canadiense. No voy a empezar a hablar de los canadienses. Deberíamos anexionar ese país. Piensa en toda la madera que podríamos tener!!"
Quizá deberíamos concentrarnos en el tema que nos ocupa. FUN LOVIN' CRIMINALS están haciendo gira en UK para promocionar un disco nuevo "MIMOSA", publicado por EMI esta semana. En lugar de los estilos urbanos (rock, rap, funk, soul y blues) de sus discos anteriores ("COME AND FIND YOURSELF y 100% COLOMBIAN en 1996 y 1998), el cocktail musical de FUN LOVIN' CRIMINALS tiene un sabor "easy-listening" muy distinto. Una colección de Caras B, tomas falsas, que muestra a FLC como lo que Huey denomina "schmoove" (algo así como suave), haciendo versiones jazz de sus éxitos y versiones de clásicos de Frank Sinatra y Louis Armstrong.
"Nos gusta la música antigua", explica Huey. "Para hacer música nueva tienes que seguir la corriente de la edad contemporánea, pero también nos gusta volver a lo más básico y tocar instrumentos. Tenemos este gen regresivo de haber querido siempre ser un grupo "lounge" en le Holiday Inn". Poco usual para un grupo asociado con el género hip hop, Huey (que ha convertido en su política el guardar su apellido sólo para él) y sus colegas (un multi instrumentista conocido simplemente como Fast, y el veterano batería Mackie, reciente sustituto de Steve Borovini) son todos ellos músicos muy completos. "La historia del hip hop surgió sólo por lo que nos rodeaba", explica Huey, "se trata de NY, allí oyes de todo, todo te influye. Pero siempre hemos tocado, y eso significa que podríamos samplearnos a nosotros mismos, sin necesidad de samplear discos antiguos. Hay mucho que decir sobre esto. No tenemos que pagar royalties, y esto está muy bien". 
El estilo tan distintivo de Huey le debe menos al rap que al blues hablado. "Tengo una voz realmente horrible, admite, dar bien todas las notas, esto es lo más difícil. Sabía que no podía ser cantante, pero tampoco rapero. No voy a hablar sobre el tamaño de mi ********, o sobre qué tipo de pistola prefiero. Pero si quieres sentarte y oír la historia como si estuvieras leyendo un libro, te daré 3 minutos y medio de algo interesante. Hay un dicho: hay ocho millones de historias en la ciudad desnuda. Cuando quiero escribir una canción, me doy una vuelta con mi bici BMX y con mis auriculares y me inspiro mirando a la gente. En NY se puede encontrar cualquier tipo de vida humana, así sólo tienes que mantener los ojos abiertos." Aunque populares en su ciudad, NY, FLC parecen desaprobar la frase 'si lo puedes conseguir allí, lo puedes conseguir en cualquier sitio'. Fuera de las ciudades más importantes de la costa FLC son virtuales desconocidos en América. Lo llamamos la zona "fly over" (que sobrevolamos simplemente), admite Huey, de NY a LA. De hecho, UK es el único sitio donde FLC son tratados como auténticas estrellas del pop, con discos en las listas, giras con éxito y paparazzi a su alrededor. "Somos como los primos neoyorquinos de todo el mundo aquí, así es como yo lo veo", dice Huey, "todo el mundo es siempre muy amable con nosotros. Nunca he tenido problemas, nadie se mete con nosotros, sales por ahí a algún bar y siempre hay gente haciéndote fotos, pero no son capaces de venderlas a ninguna revista ¿Qué podrías decirle al editor? Hey, tengo fotos de Huey borracho saliendo de un bar. Buah, tenemos 400 fotos como esa". "No somos exactamente noticias de primera página, y esto está bien para mí. No somos más que 'esos tipos de NY emborrachándose otra vez, e intentando ligar'". Daily Telegraph, 2 de Diciembre de 1999

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