“Multiverso” nos volvió a meter en los sonidos atmosféricos de su nuevo álbum, para más
tarde arrollarnos con un sonido más rockero con “El Universo” de su tercer álbum de estudio.
El silencio se adueñó de la sala para disfrutar de su voz con el tema “El Frío”, que fue
cantado por toda la sala al unísono. Los siguientes temas dejaron las emociones a flor de
piel e incluso las lágrimas cayeron por el rostro de Zahara, que no pudo contener la
emoción. Aparecieron sobre el escenario Miguel Rivera (Maga) y Alan Grice teclista que ha
grabado con Zahara este último álbum para interpretar “Big Bang”, poema de Miguel que Zahara
lo ha convertido en canción. La emoción invadió a la artista sobre el escenario que a media
canción se quedó totalmente paralizada llorando, momento precioso en el que Miguel la
rescató y consiguió que volviera en sí y nos tocasen la fibra con la unión de sus voces.
Alan se retiró entre aplausos, pero Miguel continuó para cantar “Hágase Tu Voluntad” que
volvió a subir el ritmo para hacernos bailar.
“Crash” mantuvo la tensión y el ritmo, para llevarnos a “Camino a L.A.”, con un sonido más
oscuro y fronterizo donde la luz roja invadió la sala.
La noche seguiría sorprendiéndonos con la aparición de Matthew Twaites, el productor que ha
grabado con Zahara el disco en Gales. En esta ocasión para interpretar el tema “Guerra y
Paz” en el que Martí puso la voz a Santi Balmes, que es quien pone la voz en el disco.
El siguiente tema se lo dedicó a su familia, tema que da nombre al álbum, “Astronauta”. El
silencio del público ayudó a disfrutar de este tema tan personal y en el que seguimos la
estela de la nave que surca el espacio intergaláctico en el mundo de Zahara.
Tras un pequeño descanso volvió sola al escenario, cambio de vestuario incluido. Tomó la
palabra para explicarnos cómo surgió el tema “Adjunto Foto Del Café Verbena” en un viaje a
Jaraba. Le siguieron “Tuyo” y “Con Ganas”, este último con toda la sala en total silencio,
ya que es un tema que lleva muchos años sin tocar en directo y del que se había alejado,
pero tras las palabras de sus fans en redes sociales, mails, versiones y otros medios, nos
quiso regalar un momento que no olvidaremos, en el que su voz se desgarraba según iba
cantando cada uno de los versos.

Con la banda al completo de vuelta sobre el escenario, el final parecía acercarse y en este
no pudieron faltar temas como “La Gracia”, “Bandera Blanca” y “Caída Libre”. Zahara quiso
invitar también al escenario a dos músicos (Thomas y Lucy) que le ayudaron en Gales a dar
forma al tema “El Diluvio Universal”. El escenario consiguió sonoridad con las dos baterías
y las dos guitarras.
“El Deshielo” puso a todo el público a cantar y saltar junto a la banda. Toda una fiesta que
parecía haber llegado a su fin, pero tras unos instantes en el backstage volvieron al
escenario para dar por finalizada la fiesta con “Senza un Perche” y la más esperada “Hoy La
Bestia Cena En Casa” con la aparición de bailarines y todos los anteriores invitados sobre
el escenario para poner el broche final a una noche mágica y cósmica.
ZAHARA * RETROSPECTIVA: 2008
Los inicios de Zahara en el mundo de la música comienzan cuando en el 97 hace su primera
canción "Una palabra". Se desarrolla en la canción de autor y desde entonces ha seguido una
larga trayectoria sin parar de componer. En estos años ha actuado en diversos encuentros y
ha participado en certámenes y concursos, destacando: 1er premio en el Certamen de
cantautores del Café Teatro del Pay Pay de Cádiz. Semifinalista en el Certamen Nacional de
Cantigas de Mayo celebrado en Ceutí 2004, 5º premio en el XI Certamen Internacional de
Cantautores de Burgos) Desde su primer disco autoeditado "Día913" hasta ahora ha
evolucionado desde un estilo más clásico en sus comienzos a una música pop, con influencias
tales como Maga, Piratas, Death Cab for Cutie o Love Of Lesbian. ...
(Artículo
completo)

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ENTREVISTA DE NAVIDAD
«La llegada de los Reyes significa que puedes creer en la magia»
Ha logrado situarse entre lo más granado del pop y el indie nacional. Desde que se dejaba
oir en las salas de Granada en solitario y con Zahara Eléctrica, Zahara. María Zahara
Gordillo Campos, se ha convertido en un referente de la creación con mayúsculas. Hace unos
días presentaba en Granada su nuevo álbum ‘Astronauta’ y recordaba el sentimiento de la
Navidad, un tiempo que le devuelve a la familia y la infancia.
Por JUAN ENRIQUE gÓMEZ * INDYROCK - IDEAL (Serie entrevistas: Recuerdos de Navidad
2018-19)
Foto realizada por Zahara en su casa, en exclusiva para
esta entrevista
–¿Qué significa la Navidad para Zahara?
–Llevo tantos años viviendo fuera que la Navidad siempre significa volver a casa y estar con
la familia. Este 2019 presentaré ‘Astronauta’ por la geografía española. Es un tiempo
ilusionante, lleno de energía, feliz.
–¿Qué papel juega Granada en la evolución de su personalidad, de su música, de sus
recuerdos?
–En Granada me hice la música que soy hoy en día. Empecé a vivir de esto, a buscarme mis
propios conciertos. Iba todas las semanas al Planta Baja a ver conciertos, o a Peatón a
escuchar música. Una ciudad tan llena de cultura, sin duda, impulsó mi creatividad y mis
ganas de tocar. Allí monté un dúo de jazz junto al pianista Aure Ortega y Zahara Eléctrica
junto a Alfonso Alcalá y Pablo García. Tocaba mucho en la Tertulia y, sin duda, ese
reto mensual de enfrentarme al público sin micrófono me ayudó a formar quien soy.
–¿Qué imágenes de niñez le vienen a la memoria al pensar en tiempo de Navidad?
–Recuerdo el día de Reyes como uno de mis favoritos. Desde que era niña, su llegada
significaba la ilusión y la posibilidad de creer en la magia hasta ahora que soy más adulta
y la disfruto desde el otro lado. Recuerdo a mis padres alrededor del árbol, dejando por la
noche los zapatos y un chupito para los Reyes.
–¿Cuál era entonces el sonido navideño villancicos, flamenco…?
Música Clásica. Mi padre ponía siempre música y el día de año nuevo veíamos el concierto
juntos frente a la televisión.
–¿Tiene ahora alguna canción que asocie a la Navidad?
–’Canción de Navidad’ de Silvio Rodriguez. En casa se escuchaban muchos cantautores y esa
canción está ligada a este momento.
–¿Recuerda algún regalo navideño que realmente fuese impactante o muy deseado?
–Recuerdo un año que me volví loca porque quería una ‘nena melena’. Nunca he sido de
muñecas, ni demasiado caprichosa, pero sí recuerdo que de repente quería esta muñeca por
encima de todas las cosas.
–¿Tiene un olor de Navidad?
–A infusiones con almendras. A castañas asadas. A leche caliente.
–¿Cómo es la Navidad actual de Zahara, en su casa, en su propia familia?
–Nos dividimos entre todas las familias. La de Úbeda, la de Madrid y la de Calatayud de mi
marido. Al final se trata de eso. De estar con aquellos que durante el resto del año no
puedes.
–Son ya muchos años de esfuerzos, desde aquellos primeros conciertos en solitario en
las salas de Granada, Se siente satisfecha de haber llegado a tan alto nivel como está
ahora?
–Me alegra mucho haberlo hecho así. Desde que estaba, como dices, cantando en La Telonera o
en Piccaro Café pensaba en una carrera larga, pausada y he podido disfrutar cada paso hasta
llegar aquí.
–El disco, ‘Astronauta’ muestra una Zahara que explora universos interiores y
exteriores ¿Qué significa ‘Astronauta’ para ti, un viaje, un cambio… una nueva tendencia?
–Un viaje. Abandonar la vida que se conoce y viajar por el espacio en busca de un nuevo
hogar. Es la metáfora de mi cambio vital, de lo que ha supuesto la maternidad para mí.
–¿Veremos a Zahara en alguno de los festivales de esta zona… Granada Sound, En
Órbita… ?
–Por ahora no lo sé. Presentaré aquí el 1 de febrero. Y los festivales se están cerrando
aún, así que por ahora no sabemos si además de esta presentación estaré en algún festival.
–¿En su faceta de escritora, qué podemos esperar para el 2019?
–Escribiendo este disco se han quedado fuera muchos textos que me encantaría publicar. No sé
si me dará tiempo o me atreveré, pero me gustaría que estuvieran registrados en algún lugar.
GRABACIÓN ACÚSTICO Y ENTREVISTA INDYROCK-EVASIÓN

FOTOGALERÍA: MERCHE S. CALLE - ver
FOTOGALERÍA
En 2009, Zahara, grabó dos temas en acústico para el programa de televisión
Evasión-IndyRock, que se emitía en Teleideal, Granada. La grabación, realizada por el
director del programa, Juan Enrique Gómez, contenía una pequeña entrevista. Fue grabado en
los jardines y pasillos del palacio de las Columnas de Granada, sede de la Escuela de
Traductores e Intérpretes.
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VÍDEO DIRECTO Y ENTREVISTA
NOTICIAS, CRÓNICAS, ZAHARA EN INDYROCK
SANTIFICADA SEA ZAHARA
Teatro Lara, Madrid, 13 de mayo 2015
Ciclo SON Estrella Galicia
Por Raquel Álvarez y Álvaro Arranz / IndyRock
Entraba la noche en Madrid, cuando el precioso e histórico Teatro Lara, situado en el
céntrico barrio de Malasaña, se llenó hasta la bandera para disfrutar del espectáculo
musical de Zahara y su banda, formada por los mismos integrantes de su anterior gira: “El
Deshielo”. Poco antes de las 11 de la noche del miércoles 13, su público de todas las edades
y estilos estaba dispuesto a regocijarse en ese “Reino Zaharista” que ha fraguado la
cantautora con su último trabajo “Santa”. Un álbum que salió a la venta hace menos de un mes
y que ella misma ha producido y autoeditado junto a Sergio Sastre, del grupo Miss Caffeina.

El escenario se veía perfectamente desde cualquier butaca, ya fuera en el patio o en los
palcos de más arriba. Lógico, ya que es un teatro “como Dios manda” y está pensado para eso
y para mantener a las “santas” contentas. El concierto empezó con Zahara probando el
micrófono y haciendo reír a sus fans y amigos con alguna que otra broma. Rápidamente, los
primeros campanazos de percusiones daban inicio a esta peculiar misa en la que se aunaron la
música y las confesiones sexuales más o menos pudorosas. Unos ritmos fuertes y muy marcados
dotaron de un epicismo semi-milagroso a varios de los nuevos temas presentados en directo,
como el espectacular “Oh, Salvaje”. También nos dejaron beber de su cáliz unos cuantos
sorbos que destilaban un melancólico aroma a Mecano.
Como ya sabíamos, la voz de Zahara es dulce pero potente. Tiene la fuerza suficiente para
destacar entre todos los instrumentos y para ir relatando con un eco celestial todas las
historias que va tejiendo con versos. Incluso para sobreponerse algo sobradamente a la voz
de Alberto Jiménez, de Miss Caffeina, que cantó a dúo con ella “El Frío”.
En mitad del concierto, la banda se escabulló dejando sola a la protagonista con su público.
Quizás más propio de un retiro espiritual, la ubetense se deshizo de todos los micrófonos y
usando tan sólo su voz y una guitarra acústica, comenzó un episodio más íntimo en el que nos
contó el origen de algunas de sus letras y se paseó entre el público para cantar al natural
la maravillosa “Lucha de Gigantes” de Antonio Vega, de la que ya realizase una cover en su
momento junto a Love of Lesbian.
Al volver los demás componentes, empezaron a tocar temas más movidos para terminar con
aquello de “podéis ir en paz”, ya que Zahara pedía al público que se levantase a bailar
canciones como la divertida “Caída Libre”, con chascarrillos a Yola Berrocal y a Madonna
incluidos. Para finalizar, era de esperar que una sensualidad algo siniestra marcase el hilo
argumental de aquella noche, no pasando nada inadvertidas ni en la elegante versión del
“Billie Jean” de Michael Jackson ni la tan difícilmente clasificable “Inmaculada Decepción”.
Zahara y sus cantos de sirena.
Por Armando Marín Ruiz - IndyRock
Fotos Tomás Osborne - IndyRock
19 Marzo 2010 Sevilla

Cuenta la leyenda que las sirenas eran seres fabulosos, híbridos entre la juventud de una
mujer, y la terminación de un pez, que habitaban en la profundidad de los mares y gozaban de
poderosas y atractivas cualidades vocales, con las que llevaban al desastre a todo marino
que se adentrase en sus dominios. Despojada de su cola y arropada por sus chicos fabulosos,
una sirena me condujo a la perdición el pasado 19 de marzo, en la sala Malandar de Sevilla.
Una voz, seductora y frágil de manera sincrónica, en ocasiones cruel, embriagadora en todo
instante, compartía con, en su mayoría, adolescente e imberbe respetable, la profundidad de
unas intimistas historias cotidianas, creíbles y nada fantasiosas, colapsadas de
sentimiento. Con una mirada dirigida al infinito, capaz de capturar el momento, y con su
garganta cristalizarlo en forma de melodía, Zahara parece ser de otro mundo, como nacida de
un manantial de inspiración en el momento en que Mary Shelley conoció a Ofelia.
Sin tiempo para posicionarme, la sintonía de la pasada edición de la
vuelta a España hace de génesis de una actuación que nuevamente provocó plantearme si
Malandar es un recinto idóneo para actuaciones de tal índole, donde el sonido (la percusión
se acoplaba a la voz) se hace esencial para generar la atmósfera demandada, y la iluminación
(lúgubre e inexpresiva), indispensable clave de intimidad y recogimiento. Al margen de las
citadas carencias y tras ese primer tema de esencia Power-Pop, a través de una base rítmica
acelerada, agitada y contundente, a disposición de encadenadas estrofas que dibujan una
cálida melodía, de elevado y cristalino registro (“Sólo llegué a ver salir aviones. Confío
en ir volando en ellos algún día”), una a una, Zeta nos va regalando las canciones que
configuran el que, hasta el momento, es su segundo trabajo “La fabulosa historia de la chica
que perdió el avión” (Universal, 2009); Un público entregado desde el primer acorde,
disfruta con ‘Chica Pop’, todo un homenaje a la gran Audrey Hepburn (“ella es una chica pop
atrapada en papel fotográfico”), en la que esta jienense de 25 años, nacida en Úbeda y
afincada en la Ciudad Condal, se siente reflejada a través de una estética Vintage, un aura
naïf, una dulce picardía, una atrevida sensibilidad, una inocente simpatía, que la hacen
cercana y natural.
Sin tiempo para asimilar que el espectáculo ha comenzado, el set prosigue
con ‘En la habitación’ (“El tiempo en esta habitación me sabe a vino. Dedico demasiado a
imaginar que estás conmigo”), apoyada en un trotón ritmo de percusión, mostrando un Pop
cercano e inmediato, con arreglos de guitarra muy espartanos, y un sorprendente riff de
bajo, extraído del mismísimo ‘Walking on the Moon’ de The Police; ‘Photofinish’, gélida y
desgarradora historia de desamor, “Me dueles tanto que no quiero volverte a ver”,
introducida a piano y dedicada a nuestros peores enemigos. Tras ella, el primero de los dos
recientes temas que serán incluidos en un próximo trabajo, ‘El lugar donde viene a morir el
amor’ con la que es capaz de provocar un escalofrío que alcanza lo más profundo de tu ser.
La frescura en sus canciones y una expresividad corporal que acompaña e
ilustra cada uno de sus versos, nos acerca al país de las maravillas, un país donde todo
florece, en el que el sol desprende cálidos rayos luminosos y los corazones acompañan a la
percusión con sus latidos. Y nada mejor que ‘Olor a mandarinas’ para recrear ese inminente
aroma a azahar propio de la capital hispalense y gritar a los cuatro vientos “No quiero un
final feliz, sólo quiero serlo”. Alguien del público le tira una mandarina de peluche, con
gafas de corazón y en su mano, el premio de la música que recientemente otorga a Zahara como
mejor artista revelación del pasado año.
Un derroche de talento y multitud de virtudes atesora Zeta, bajo un manto
de pizpireta y dicharachera personalidad, encarnando el espíritu de la felicidad sin
paliativos, en consonancia con ese telar florido, de ramos y pétalos sonoro, como fondo
primaveral, y encarnando el papel de un pájaro que no vuela sino planea al son de una voz
que no conoce límites. Cada vez más personal, nos iremos sumergiendo lentamente en su
universo de melodías, que siguen sonando incluso cuando sus labios permanecen sellados en
canciones como ‘Zapatos Rojos’, ‘Diciembre’, ‘Pregúntale al Polvo’ (la otra novedad de la
noche), “No penséis mal, que no va sobre eso” comenta Zeta, y ‘Piscinas en Verano’.
Y llegó el momento estelar de la noche, punto de inflexión que provocó un
antes y un después en la actuación, la cual hasta el momento podría tildarse de correcta. A
petición de la artista, el público fue sentándose en el suelo, y en formato acústico, nos
mostró su lado más vulnerable con ‘Con las Ganas’. Frases como “Me moriré de ganas de
decirte, que te voy a echar de menos” atestiguan un instante realmente emotivo, en el que
Zahara casi rompe a llorar, del mismo modo que en su recién estrenado videoclip, en la línea
del ‘Nothing Compares 2U’ de la O’Connor, o el ‘Wawick Avenue’ de Duffy. El tiempo parecía
haber tomado un pausado ritmo en su intento fallido de quedar inmutable.
Zeta tiene algo especial, una magia que sabe trasmitir a la perfección;
Sabe hacerte reír con sus anécdotas y al siguiente segundo, es capaz de estremecerte hasta
erizarte el vello, a través de sensibles melodías y alegatos de buen Pop; tras encogernos el
corazón, una sosegada paz inundó el recinto y una extraña sensación de esperanza y
felicidad, provocaron el júbilo de los allí presentes, como si de una fiesta de cumpleaños
se tratase, cerrando con ‘Tú me llevas’ y ‘Funeral’ precedida por una breve versión del ‘Is
There a Ghost’ de Band of Horses.
Se abren los bises brindando con cava, con motivo del cumpleaños de su
bajista Alfonso Alcalá, que no duda en ponerse unas orejeras de Hello Kitty, mientras Zeta
aclara que ‘La canción más fea del mundo’ no está inspirada en él. “Y llegados a este punto,
os pido que cantéis al amor cursi y ñoño. Sacad vuestra Paulina Rubio interior”; Con peluca
rubia impuesta y gafas rojas de corazones, el espectáculo se cierra con ‘Chico Fabuloso’.
Dieciséis canciones con un apoteósico y festivo final a ritmo de conga carnavalesca, confeti
por doquier y una pasmosa sensación de felicidad, plasmada en las sonrisas de todos los
presentes, que sin duda disfrutaron de un espectáculo sin precedentes, que rozó el
sobresaliente, si no hubiera sido quizás por el recinto en el que tuvo lugar.
REPARTIENDO GOLOSINAS
por Enrique Novi
Sábado 12 de diciembre 2009 Sala Industrial
Copera
La dulce Zahara vivió su concierto granadino como una vuelta a casa, pues aunque natural de
Úbeda, fue aquí donde dio sus primeros pasos como cantautora por los escenarios más humildes
de la ciudad, parapetada tras su guitarra y su sonrisa perenne bajo el nombre de Zahara
Eléctrica. Fueron años de iniciación los que vivió en Granada y ya se sabe la huella
indeleble que suelen dejar en la memoria esos tiempos irrepetibles. Por ello se mostraba
algo nerviosa al comienzo de su actuación y le asaltaba una risa floja cada vez que trataba
de dirigirse al público. La mayoría eran los mismos de entonces a pesar de las expectativas
que parece haber puesto su compañía en su carrera. Superada la etapa en que se descubrían
con pasión a autores que marcaban, Jeff Buckley pongamos por caso, emprendió un viaje en
busca del éxito que es el que le ha llevado a la publicación de su segundo álbum de la mano
de Universal. El que está paseando por los escenarios de toda España y con el que se ha
puesto en manos de los productores profesionales como aconsejaban los capos del sello. En
concreto han sido Carlos Jean y Ricky Falkner los dos encargados de dotar a sus
canciones del empaque que se le supone a las producciones con posibilidades comerciales. Y
ahí precisamente encontramos el primer escollo.
Nadie va a negar la cautivadora fuerza que desprende su fragilidad.
Tampoco la naturalidad de sus composiciones ni el talento con el que extrae la mucha música
que lleva dentro, pero tal vez la vestimenta con la que las recubre no sea la más
favorecedora. Y en esa búsqueda de la fórmula que la conduzca hacia audiencias masivas, la
que corre el más serio riesgo de ser damnificada es la propia Zahara. La propuesta por la
que apuesta nada entre varias aguas sin decantarse por ninguna. No es declaradamente
comercial y por tanto difícilmente enganchará a los oídos más acomodaticios –esos que nutren
las arcas de las grandes compañías-, y, aunque la banda que la acompaña atesora suficiente
solvencia instrumental, su intento de dotarse de credibilidad alternativa se queda en eso,
en un intento.
Los arreglos de los temas se antojan densos en exceso y ahí se impone la
mano de Ricky Falkner, conocido por sus trabajos con Standstill, Egon Soda o Sanpedro,
además de múltiples producciones para otros artistas. El resultado final acaba perdiéndose
entre la búsqueda de la coartada alternativa y la respetabilidad, y el impacto comercial,
ese esquivo equilibrio que tan pocos alcanzan, y mucho menos aquellos que lo persiguen a
toda costa. En medio terminan enterrados la mayor parte de sus hallazgos. Pero Zahara se
muestra despreocupada de todo esto y convierte cada actuación en una fiesta de cumpleaños
donde no falta el confeti ni los abrazos con los amigos como Jean Paul, que además de
telonear, se marcaron un tema con ella. Al final, y a la espera del reparto de golosinas
inherentes a estas fiestas, hasta se bajó del escenario para hacer el trenecito con sus
fans.
ZAHARA, OUH YEAH FESTIVAL 2008
+ Vetusta Morla
+ fotos y crónica
Los inicios de Zahara en el mundo de la música comienzan cuando en el 97 hace su primera
canción "Una palabra". Se desarrolla en la canción de autor y desde entonces ha seguido una
larga trayectoria sin parar de componer. En estos años ha actuado en diversos encuentros y
ha participado en certámenes y concursos, destacando: 1er premio en el Certamen de
cantautores del Café Teatro del Pay Pay de Cádiz. Semifinalista en el Certamen Nacional de
Cantigas de Mayo celebrado en Ceutí 2004, 5º premio en el XI Certamen Internacional de
Cantautores de Burgos)
Desde su primer disco autoeditado "Día913" hasta ahora ha evolucionado desde un estilo más
clásico en sus comienzos a una música pop, con influencias tales como Maga, Piratas, Death
Cab for Cutie o Love Of Lesbian.



FOTOGALERÍA AQUÍ
Con la intención de llegar a otros escenarios y como consecuencia de su propia evolución,
Zahara se une en 2006 a Alfonso Alcalá al bajo y Pablo García a la bateria, adoptando un
sonido más indie, dando conciertos en salas cómo Planta Baja (Granada), Siroco ó Café la
Palma (Madrid), etc.
Zahara continua actualmente con las dos formaciones y durante los últimos años ha actuado en
diversas ciudades como Madrid, Sevilla, Granada Barcelona, Valladolid, etc. Teniendo la
suerte de compartir escenarios con músicos a los que admira cómo Fon Román, Quique González
o Santi Campos y grupos como Standstill o Miss Caffeina
Asi mismo, han sido radiados en el programa 'Bienvenidos al Paraíso' de Radio3 y gracias a
la creación de este myspace han sido escuchados por mas de 200.000 personas en un año.