Excelente entrada la que recogió la sala pequeña de Razzmatazz
para acoger la visita de la guitarrista inglesa. Y hablo de
“excelente” porque uno de sus referentes –mucha gente compara
el talento de Joe Bonamassa al de Joanne Shaw Taylor- no
consiguió llegar a la mitad del aforo de la misma sala en su
primera visita. Sea como fuere, el ambiente era el perfecto
para que la joven guitarrista presentara el que es su sexto
trabajo de estudio, “Wild”. Siempre que hablan de ella la
vinculan por influencia a los clásicos guitarristas de corte
blues-rock como el malogrado Stevie Ray Vaughan, el mencionado
Joe Bonamassa, o a músicos de nueva generación como Johnny
Lang o Kenny Wayne Sheperd.
Pero hay mucho más que una gran guitarrista detrás del proyecto de Joanne Shaw Taylor: comenzando por un trabajo compositivo sublime –no olvidó tocar “Dyin’ to know” con el cual abrió la contienda, “Nothing to lose”, aquel fantástico “Jump that train” o ese delicioso medio tiempo titulado “Diamonds in the dirt”-, su magnífico registro vocal y una gran sensibilidad. Uno de los aspectos característicos de la guitarrista al verla en directo es su perenne sonrisa y un “punch” modélico en sus interpretaciones que otros guitarristas con más trayectoria no consiguen.
Así, el concierto fue transcurriendo “in crescendo”, sobre una banda moldeada a su medida y dejando para el final temas obligados como aquel “Ready to roll”, esa salvaje maravilla titulada “Wild” o aquel “Tied & Bound” que sirvió para cerrar el show. Poco más, “Going home” premió a los asistentes por sus calurosos y merecidos aplausos, sabiendo que el tiempo terminará de dar forma a la que es una de las grandes guitarristas de la actualidad.
“Impactante
guitarrista y poderosa vocalista”
Time Out
“Joanne Shaw Taylor tiene suficiente alma para competir con
lo mejor que tenga que ofrecer el blues del Delta del
Mississippi”
The Sunday Telegraph
“La reina del blues rock”
Powerplay
Joanne Shaw Taylor se ha consolidado como la estrella inglesa
en el mundo del blues rock. La chica de la gran voz procedente
de Black Country ha girado incansablemente alrededor del
globo, publicando aclamados discos y ganándose una base de
fans gracias a sus actuaciones con algunos de sus ídolos
musicales.
Aburrida con el pop de usar y tirar que escuchaba en la radio
a finales de los 90 cuando aún acudía a la escuela, comenzó a
rebuscar en la colección de discos de su padre y encontró
joyas ocultas en la forma de discos de Stevie Ray Vaughan,
Albert Collins y Jimi Hendrix, de los que se enamoró
inevitablemente. A los 13 comienza a tocar su primera guitarra
eléctrica, y tres años más tarde, abandona el colegio para
lanzarse a su aventura musical, y el destino hace que su
primera demo caiga en las manos del miembro de Eurythmics Dave
Stewart, que queda anonadado con lo que allí escucha. Allí
comienza una amistad que desemboca en al apadrinamiento de
Stewart, que le consigue sus primeros grandes conciertos y su
primer contrato discográfico.
Debuta con el prometedor White Sugar, grabado en Tennessee con
el productor Jim Gaines (Carlos Santana, Johnny Lang, Stevie
Ray Vaughan), que ya muestra el potencial, aún por pulir, de
una joven Joanne de 21 años. El disco le vale para recibir la
llamada para telonear al supergrupo Black Country Communion,
donde milita otro de sus grandes valedores, el guitarrista Joe
Bonamassa, que se deshace en elogios hacia la explosividad de
Joanne. Una energía que queda plasmada en su siguiente disco,
Diamonds in the Dirt (2010), donde comienza a aflorar su
talento compositivo, y con el que continúan las alabanzas de
la industria y las nominaciones y premios. Así llega Songs
from the Road (2013) y el espaldarazo definitivo que supone
The Dirty Truth (2014) de nuevo con Jim Gaines a los mandos,
un poderoso disco de rock potente rebosante de influencias del
blues clásico. Wild (2016) la reafirma como una gran artista
en ciernes no sólo bajo el paraguas del blues, sino en la
escena musical del rock en general. Habiendo teloneado a
nombres de peso como Joe Bonamassa, Tedeschi Trucks, Kenny
Wayne Shepherd, Glenn Hughes, John Mayall o Wilko Johnson,
Joanne Shaw Taylor está preparada para dar el espaldarazo
definitivo como la nueva reina del blues-rock mundial.
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