MARÍA BLANCO Y TXARLIE SOLANO . Ver galeria
La primera en subir al escenario fue María Blanco, suave y armónica voz líder de Mäbu (ya con 10 años de carrera y 4 larga duración), junto a su compañero Txarlie Solano. Presentaron varios de sus éxitos invitando a Georgina al escenario para cantar a dúo “Amor del litoral”, y luego a Rozalén para iniciar lo que sería una noche de incontables colaboraciones.
Le sucedió Cris Méndez, con sombrero, guitarra y rock and roll para bailar. Con ella pudimos disfrutar por primera vez de la poderosa banda de músicos con la que contó esta gira. Luego hizo lo suyo Patricia Lázaro manteniendo a la audiencia activa y atenta a sus letras existencialistas para culminar con un dúo junto a Rozalén, quién a partir de ese momento se adueñó del escenario. Entre anécdotas y canciones que se han convertido en verdaderos clásicos como “Girasoles”, la cantautora originaria de Albacete no dejó pasar la oportunidad de llamar la atención sobre lo rezagados que están actualmente los contenidos feministas en TV y otros medios porque “no venden”. Terminó su presentación a dúo con Georgina, logrando que toda la audiencia coreara “La puerta violeta”.
El cierre no pudo quedar en mejores manos que las de Georgina, quien con su guitarra y con toda la banda le dio el último impulso de energía a una noche que ya se había convertido en memorable. Invitó a Cris Mendez a cantar juntas “Rara” para luego agradecer a los organizadores y al equipo técnico con un mensaje de unión y trabajo en equipo. Se despidió con su tema “Supermujer”, dando fin a un recital impecable que demuestra que la igualdad de oportunidades es posible y está a la vuelta de la esquina.