Foto Irma Romero
Llegue a Oxford a eso de las 13,30. El centro estaba a tope, el
sábado es un mal día para rondar por allí, hasta que pille el
bus que me llevaría a Cutteslowe, tardó lo suyo. Desde la parada
del bus había una caminata de unos seis o siete minutos hasta el
cruce del festival. Todo muy tranquilo, una zona residencial,
sobre todo muy verde. Las comisuras de mis labios empezaron a
tirar para arriba inevitablemente. ya estaba empezando la notar
la sensación de alegría en mi tripa, esa sensación de ir a un
festival. A la entrada me cambiaron el tiket por una pulsera
dorada, algo impersonal sin ninguna inscripción. La movida
estaba al otro lado. El lugar en sí no era muy grande, todo el
conjunto estaba formado por dos escenarios más el dance y una
carpa dedicada a los niños, por algo todo el dinero reunido en
el festival iría a una buena causa para ayudar a los niños. El
campo estaba rodeado por los habituales puestos de comidas,
rastrillos, etcetera.
Nada más entrar, a la derecha, estaba la fox stage, donde
tocaban grupos pequeños y más experimentales. En frente, al otro
extremo, la dance tent, desde donde provenía música trip hop,
para la alegría de unos cuantos. Al lado de la fox stage estaba
el beer tent y abajo la main stage, a la derecha una carpa de
considerable tamaño y, a la izquierda, una carpa para los niños.
Bastante gente rondaba por allí ya, y el numero iba aumentando
al paso del día. Me dedique a dar una vuelta general antes de
terminar en el main stage para ver una cara conocida entre el
público, era Nigel, de UT, charlando con alguien. En ese momento
estaban tocando A.T.L. que verdaderamente me entraban por uno y
salían por el otro.
Un stage show con una chica de 16 años bailando alocadamente en
el escenario, no hizo más que levantarme las cejas de puro
corte, ridiculo. me sente fuera de la carpa mirando a la gente a
mi alrededor. había de todo, la verdad, en un momento dado,
cuando levanté la vista, vi a Andy que venía desde el área de
backstage, todo vestido de oscuro y el pelo más corto, cosa que
dibujo una sonrisa en mi cara. Tumbleweed, eran el siguiente
grupo en el main stage, a los cuales no les ví, pero algo más
tarde, cuando estaba sentada en mi sitio habital vi una pandilla
de chicos de unos 17 años al lado mio de los que uno se parecía,
de forma impresionante, a Gaz, de Supergrass, pero más joven,
claro, al final resultaba que cuando mucho más tarde, cuando
hojeaba una revista local con el festival, me di cuenta que era
un Coomber, el hermano pequeño de Gaz. Dustball, era uno de los
grupos que quería ver ya que había visto ese nombre impreso en
tantas publicaciones musicales locales, la media de edad del
grupo no llegaría a los 18 años. me hizo gracia la forma chula
de comportarse el cantante, y el guitarrista no quedaba lejos de
aquello, de pose con toda la fuerza de unos chicos de 18 años,
entrañable, la verdad. Musica guitarrera a lo Ash. Decidí
pasarme por la Beer Tent para calmar la sed, y al volver vi a
Mark (ex-Ride) hablando con unos colegas suyos y al poco
localizó a alguien conocido al entrar al entrar en el backstage
y se fue sonriente a saludar al recien llegado, que resultó ser
el ex bajo de Ride.
Un abrazo cariñoso y una palmadita a la espalda, bonito
encuentro. Animal House, con Mark de cantante recibió unos
calurosos aplausos, siguiendo así la línea de Ride pero más
agresivo, el sonido en aquella carpa era impresionante y la voz
de Marck al igual que la de su compinche el guitarrista, emanaba
una fuerza que le hizo sumergirse totalmente en aquel mundo
sónido con tanto feedback. Tocaron una hora con la diferencia de
la media hora de rigor de los grupos anteriores. Descanso al sol
y ¿a quien veo pasar de nuevo? pues ni más ni menos que a Andy
que, acompañado de una mujer mayor que él, ¿novia? iba
salundando a algunas personas con una sonrilla timidilla en la
cara y volvió a entrar en el backstage.
Como todavía llevaría algún tiempo hasta que Candyskins salieran
al escenario me fui a dar otra vuelta, esta vez pasando por uno
de los puestos con shift disco merchandise y el programa, que
hasta ese momento no había visto por ningún lado. Saqué mi libro
de notas y empecé a apuntarlo. Después eche una ojeada a las
camisetas. De repente oigo al chico del puesto bromear con
alguien que estaba a mi lado sobre las camisetas y, al darme la
vuelta, me encuentro a mi lado la cara de Nigel de nuevo. En la
fox stage estaba tocando un grupo llamado Man Mountain, con un
cantante enloquecido con corbata pegando botes en el escenario.
Ummm. Otra pint para mi creo. Entrando en la beer tent, Jason,
el bajo de UT, charlando abrigado por dos crías de 16 años que
se disculpaban por haberle tocado la tripa en el gig anterior.
Jason, todo educado, escuchaba las bobadas que decían.
Candyskins, fue definitivamente, uno de los favoritos del
público, ese pop pegadizo, alegre, perfecto para un día de
verano, con un sonido potente, compacto, toda una pequeña
maravilla. El grupo que más habiamos esperado tocaría después.
UT Salieron al escenario a eso de las 20,10 acompañados
por unos furiosos aplausos. Andy sonriendo tímido, bajando la
vista, Jason y el siempre jovial Nigel ocuparon sus respectivos
puestos y definitivamente emanaban un aire de confianza porque,
desde luego estaban en su propio sitio, era su casa. No es de
extrañar que empezaran con "Forget about me", esos acordes
lentos como poniendo el motor en marcha pero, al mismo tiempo,
probando terreno. El set list no varia demasiado con respecto a
los últimos conciertos: "Setle down" / Same mistakes / seguidos
por: "Tyre tracks" que fue la primera canción introducida por
Andy, como que "hacia tiempo que no la habíamos tocado", y
graciosamente al empezar a tocarla Andy se confundió de letra,
pero enseguida se dio cuenta y, divertido, comenzó a tocar como
era debido.
Es una preciosa canción y en directo gana más fuerza todavía. A
ésta le seguía Higher than reason, otra favorita del público y
luego le tocó a Jason meter la pata con la guitarra chirriante.
Andy levantó las cejas un tanto divertido. Una de las cosas que
más gracia me hicieron fueron los solos de batería de Nigel. Se
emocionó totalmente con su equipo, sobre todo en "building",
donde no pude más que asombrarme con el alucine del tio. Creo
que hasta Andy se sonrió por el numerito que estaba montado su
amigo y, para no fallar en Stone, Nigel empezó a tocar demasiado
pronto y Andy se dio la vuelta con una mirada divertida. "Oops,
Sorry", soltó Nigel y Andy "And again". Su voz sonaba preciosa a
pesar de desafinar de vez en cuando, pero se les veía relajados
y hasta Andy comentaba más cosas de lo habitual.
Posiblemente eran conscientes de que tenían la libertad de
tomarselo en plan soundcheck, divirtiendose un rato, aunque lo
mejor vino después, cuando al final de la primera estrofa de
Finest little space, se cortó todo, totalmente, la reacción de
la gente fue de sorprendida a divertida y venga a aplaudir.
Esperaba ver una cara de mosqueo en Andy pero, más que nada,
sonrió flipado, los tres se lo tomaron con fiilosofía, con Nigel
siempre bromenando y llamando a un tal Mark, encargado de luz y
sonido para que saliese al escenario, con la consiguiente ronda
de aplausos del público. Se encendieron las luces y volvió el
sonido, para el delirio de todo el andante por allí. Nigel fue
el primero en volver a su sitio con alguna que otra bromita más,
y Andy "let's start from the top again", con una cara sonriente,
más aplausos. Solved cerró el concierto, que duró unos 50
minutos, verdaderamente uno de esos momentos en los que querrías
que volviesen al escenario de nuevo, pero se cerró el telón,
hasta la próxima. hacía tiempo que no me había divertido tanto
en uno de sus gigs. Estaba anocheciendo fuera y entrabamos en
ese ambiente de concierto veraniego. Lo mejor llega de noche.
Los otros
headliners del día eran Hurricane # 1 , con Andy
(ex-ride) al frente. Hay que decir que tienen un sonido
potente pero algo frío, hasta el punto que empezaron a
recordarme a Oasis, sobre todo el cantante. Lo tienen todo
para convertirse en el siguiente supergrupo, todo lo que a
los criticos musicales británicos les encanta: pose, sonido
potente y canciones para ser tarareadas en los estadios de
fútbol. Los estuve viendo durante tres o cuatro canciones y
decidí pirarmelas. Fue un dia excelente. No hay nada que
gane al ambiente festivalero por la noche.
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