Tenemos más horas de sol al día, las flores están renaciendo y
la gente parece más feliz. En efecto la primavera ya está aquí
y para celebrarla que mejor manera que escuchando buena música
en directo. El pasado fin de semana tuvo lugar la tercera
edición del Festival La Primavera Trompetera en Jerez de la
Frontera, Cadiz. Una cita que ya se ha vuelto indispensable
para todo el que quiera celebrar el comienzo de la estación.
Rebasando con creces su propio récord con más de 50.000
asistentes entre los dos días que tuvo suceso y un total de 50
artistas.
Inauguramos los escenarios con Eskorzo, el grupo granadino a
pesar de la hora tan temprana en la que tuvo lugar la
actuación consiguió no solo llenar parcialmente, sino que
además derrocharon buenas vibraciones y energía a raudales, la
gente bailó, cantó y saltó con ellos. Con temas como “Suave”o
“Mambo Zombie”. Siempre con su característico sonido que pasa
por los ritmos más rockeros juntos a su usual base de reggae,
afrobeat, ska y flamenco. Estrenaron en directo su nuevo tema
“La Pena” del que se puede encontrar videoclip.
Seguidamente fuimos a ver a la mítica banda madrileña Mama
Ladilla, probablemente fue el único concierto del festival en
el que en vez de cantar el público al unísono, lo que hacían
era reír. Y es que las letras tan desternillantes de ese
conjunto no pueden provocar otra cosa que risas. Con temas
como “Flípalo” fueron inevitables los pogos. Por supuesto,
hubo tiempo para los tracks más clásicos del grupo, como “Mi
nave Mix”, “Tu fiesta”, “Chanquete ha muerto” o “Cunnilingus
Post Mortem”, los cuáles se han convertido en verdaderos
himnos de esta banda.
Con este buen sabor de boca nos fuimos a cenar algo para
recargar fuerzas. En términos generales la organización del
festival fue buena, todas las zonas estaban bien separadas y
el espacio que tenía cada escenario para albergar a su público
era muy amplio, previendo la venta de todas las entradas, tal
y como sucedió. Quizás echamos en falta unas mesas o asientos
para sentarse una vez que ya habías pedido la comida y es que
en lugares así se pasan muchas horas de pie, por lo que se
agradecería bastante tener un sitio donde sentarse.
De camino para uno de los escenarios grandes ya estábamos
escuchando los primeros acordes de Loquillo, aunque al
principio estaban un poco desganados, pronto se metieron al
público en el bolsillo, el cual les recibió entre vitoreos y
aplausos. Dieron un buen espectáculo intercalando sus temas
clásicos con los de los últimos discos. Entre los espectadores
se podía ver la unión de muchas generaciones diferentes que
corearon juntos temas como “El Ritmo Del Garaje”, “Rock n Roll
Star”, “Cadillac Solitario”, entre otros. Sin duda todavía les
queda mucha guerra por dar.
Con la noche ya caída sobre nosotros llegaron las luces rojas
incandescentes. Y es que estas, son características del trío
jienense Guadalupe Plata que lleva a su público a un viaje
sensorial a través de su blues surrealista y sus letras
oscuras. La fuerza que desprenden emana de la multitud de
temas contundentes y el virtuosismo que posee la banda. “Tengo
el Diablo en el Cuerpo” o “Calle 24” son solo algunos de los
que pudimos escuchar.
Despedimos la primera jornada con el dj Dannyboy influenciado
por el indie en todas sus vertientes, aplica su técnica
adquirida en los platos mezclando estilos tan variables como
el rock, funk, el susodicho indie. Con el común denominador de
hacerlos bailables de modo que nunca termine la fiesta.
El sol brillaba en el circuito de Jerez donde un montón de
campistas se levantaban para comenzar lo que sería la segunda
jornada de conciertos de este festival tan joven. Con el
avance del día el parking empezaba a volver a llenarse de
coches y el ambiente se animaba por momentos.
Entramos al recinto para deleitarnos con uno de los grupos que
más repercusión esta teniendo en el panorama nacional de
reggae, Green Valley, su unión y soltura en el escenario
acompañado de la gran conexión que consiguen con el público
hace de su espectáculo algo único. Recalcaron sobretodo su
nuevo disco “Ahora”, que la gente coreó y bailó como si de sus
singles más clásicos se tratara. Nos tocaron la fibra sensible
con temas como “Si no te tengo” o “No me voy a rendir”, entre
otros. Quizás la mayoría pensará que los pogos son algo típico
de géneros más “fuertes”, pero esto no es una regla cerrada y
mucho menos con un grupo como Green Valley que formaron de los
pogos más grandes que se pudieron ver por el festival, algo
posible gracias a su riffs pegadizos y a su increíble conexión
con la gente, que es igual de fuerte como el amor que se
procesan entre ellos. Sin duda tienen un futuro largo y
maravilloso, pero por ahora como ellos mismo dicen, no hay
mayor regalo que vivir el presente.
Posteriormente fue el turno de La Raíz, el grupo siempre sabe
como hacer vibrar al público. Aunque en este caso los músicos
fueron impecables, no se podría decir lo mismo del cantante
principal, que tenía la voz bastante tocada. Dieron un repaso
a toda su discografía profundizando sobre todo en su nuevo
disco “Entre Poetas y Presos” que tantas sorpresas positivas
les ha traído debido a la calidad tanto en letra como en
lírica del mismo.
Kase.O ha vuelto, esta en tu área, en tu azotea. Con la fuerza
que siempre le ha caracterizado, literalmente él y sus músicos
se comieron el escenario. Con un espectáculo de una calidad
soberana, donde hubo cabida para bailar al son de ritmo
latinos, de contarnos una historia a través de poesía unida a
una actuación teatral que antecedía al tema “Mazas y
Catapultas”, posteriormente seguía con está historia para
culminarla con el track “Mitad y Mitad”. Por supuesto no pudo
dejar fuera temas clásicos como “Cantando” que hicieron
retumbar los cuerpos de todos los asistentes, que no fueron
pocos.
Pasamos al otro escenario principal donde comenzaría a sonar
Macaco, aunque su directo tenga una calidad que pocos grupos
pueden alcanzar, es cierto que su espectáculo comienza a ser
un poco repetitivo si los has visionado en varias ocasiones en
el último tiempo. Haciendo un repaso sobretodo a su último
trabajo “Historias Tattoadas” con temas como “Hijos de un
mismo Dios”. En “Love is Only Way” realizaron la acción que
hacen cada vez que lo tocan, en la cual cada miembro del grupo
sostiene una tela con una letra que termina formando la
palabra amor por un lado, y love por el otro. Quizás la parte
más original del directo en comparación con los anteriores fue
que el propio Macaco casi al final del concierto se colocó una
cabeza de mono con luz verde en los ojos. Tuvieron una gran
unión con el público que no dudó en corearles, pero echamos de
menos la falta de innovación.
En uno de los escenarios secundarios empezaba a sonar con
fuerza el grupo sevillano Narco, con sus letras
reivindicativas que conjuntan perfectamente con los potentes
riffs de guitarra, el doble bombo de batería y la fuerza de
todos sus músicos. Se pudieron escuchar temas como “Matanza
Cofrade”, “Tu Dios de Madera” o “Lo peor del Barrio”. Y
algunos clásicos como “La Hermandad de los Muertos”, todo ello
a trago de Whisky, un acto que se ha convertido en mítico por
parte del cantante, pues lo repite prácticamente en todos sus
directos.
Decidimos ir a reponer fuerzas y cargar cargadores para
tenerlo todo listo al cierre del festival, en ese tiempo
estuvo sonando Mala Rodríguez, entre otros artistas. Pidió no
ser fotografiada, una pena pues aunque musicalmente no fue de
sus mejores actuaciones, si que dió uno de sus mejores
espectáculos. Llevando consigo incluso bailarinas
profesionales con las que realizó coreografías de lo más
originales.
Fuimos a la zona de prensa que estaba situada en la parte VIP,
aunque el sitio VIP en sí estaba bastante bien ambientado, ya
que era amplio para que los artistas, invitados y el resto de
profesionales pudieran disfrutar del festival agusto. Es
cierto que el lugar ubicado para prensa dejó bastante que
desear, no sabemos si fue a causa de ser el último día, pero
lo “prometido” por parte de la organización no se encontraba
por ningún lado, ni Wifi, ni alargaderas para enchufar
portátiles, baterías… Simplemente había un par de mesas con
lámparas de flexo inhabilitadas, ya que no había ningún lugar
para poder conectarlas, como hemos relatado anteriormente.
Esperamos que para el próximo año acondicionen mejor la zona
de prensa.
Como broche final aparecía el artista Fyahbwoy, conocido
también como “El Chico de Fuego” que congregó a un gran número
de personas siendo uno de los conciertos con más público del
festival. No sabemos si fue por las horas tan intempestivas,
pero el artista dio un espectáculo que dejó bastante que
desear para lo que nos tiene acostumbrados, apenas hubo juego
y comunicación con el público. En cuanto al repertorio fue
bastante variado tocando temas de su último trabajo como
“Tanto por Ti” y clásicos para animar a la gente como “Siempre
hablando de más”, “Baila como de la gana” o “Forgive to
Forget”. A pesar de su leve desgana, la gente no paraba de
gritarle y corear sus tracks. Esta claro que Fyahbwoy es ya un
consolidado artista, que despierta la pasión del público.
Así terminó lo que fue la tercera edición del Festival
Primavera Trompetera, que pretende y consigue mejorarse en
cada año. Por lo que, le auguramos un gran futuro.
www.primaveratrompeterafestival.com
PUBLICIDAD