YOANN LEMOINE, DE LA PANDEMIA A LA ENTERNIDAD
Woodkid presenta su disco S16, once melodías para la
historia de la música pupular
JUAN GALLARDO TERUEL * INDYROCK
Pureza musical, melodías que son polvo de estrellas, la voz
cálida y herida de Yoann Lemoine es la protagonista en 11
melodías para la historia de la música popular, como un largo
poema desde los tiempos de la pandemia para la eternidad.
Los ritmos industriales, a veces obvios (Goliath, Highway 27),
a veces bajo tempos y ahogados en tonos bajísimos (In your
Likeness), nos recuerdan que hay matemáticas detrás de cada
sueño, en canciones como Reactor Shift o Horizons Into
Battlegrounds directamente no aparecen.
Maravillosos los coros de Reactor y Minus Sixty One.
A Woodkid le importa muy poco lo que tú pienses, no mira hacia
atrás y se pasea en un paisaje de melodías exquisitas que
esconden tesoros que pasarán desapercibidos durante el primer
par de días, de semanas. Música a veces tan visual que se
evidenciará más en su belleza cuando Yoann comience a ponerles
las imágenes con las que soñaba cuando las compuso.
Muchos momentos redondos, pero tengo que destacar la pausa de
Minus Sixty One en 3:44; te atraviesa el corazón y te deja ver
todo lo que está por venir para rematar esta grandísima obra
de arte.
Entre las diferentes canciones que componen este disco casi
perfecto, logran destacar: Goliath, Reactor, Minus Sixty One.